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sábado, 8 de julio de 2017

Bleach del 401 al 500

He vuelto cien capítulos después para traeros otro análisis de Bleach. Y contando este solo quedan tres así que pongámonos a ello. A diferencia del mes pasado, estos cien capítulos han estado repletos de eventos. La saga de los Arrancar ha terminado, empezó la saga de los Fullbring, terminó la saga de los Fullbring y empezó la saga de los Quincy. No perdamos más el tiempo que esto va a tener tela.

Y al fin, tras doscientos capítulos amagando, la saga Arrancar ha terminado. Ha sido una saga bastante interesante, con algún buen villano como Grimmjow, Ulquiorra, Aizen, Tousen… HA sido un poco más interesante y monumental que la saga de los shinigamis, aunque al final se excede demasiado con las peleas y puede llegar a aburrir.

Como dato a destacar tenemos el final del desarrollo de Ichigo y su máscara con una confrontación épica, que no llegamos a ver muy bien. Aun así, esto termina con todo lo que Tite Kubo lleva preparando durante quinientos capítulos y la verdad es que funciona tenemos en cuenta todo el desarrollo previo.

Destaca la confrontación final entre Aizen e Ichigo con la cual debería haber terminado el manga. Es un combate de poderes abrumadores y que despoja de las habilidades de shinigami a Ichigo. Si no hubiera pasado algo similar con Ishida estoy seguro de que esto me sorprendería.

Pero, en resumen, hasta el capítulo 423, Bleach es un manga shounen decente. No es ninguna joya, pero se sostiene y hasta nos aporta una historia medianamente interesante. Y entonces llegan los Fullbring.

Mirad, entiendo que es una saga de reinicio, con Ichigo recuperando sus poderes y eso, pero: ¿De verdad a Kubo no se le ocurrió ningún hilo mejor del que tirar?

Es que la idea inicial de los Fullbring es caótica y apenas tiene sentido. Tienen poderes, los cuales canalizan a partir de objetos, porque un hollow atacó a uno de sus progenitores cuando eran pequeños. Hasta ahí bien, pero, sus poderes son aleatorios según la persona y dependen mucho de lo que requiera el guion. Los shinigami y los arrancar, al menos, tenían poderes específicos por ser de la especie que eran. Sin embargo, los Fullbring pueden desde manipular el espacio y el tiempo hasta solo aumentar su fuerza física. Todo esto sin entrar en el hecho de que Chad sea un Fullbring que canaliza su poder gracias a su piel, lo cual no hay por dónde cogerlo.

Pero al menos es una saga con un cierto impacto para nuestro protagonista así que le voy a dar un cierto pase. Aun así, esto es una tarjeta amarilla.

La saga Quincy acaba de empezar así que todavía no puedo decir demasiado, pero espero que sea un poco mejor que la anterior.

Nos veremos dentro de cien episodios

Arcalaus

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